Sres. Ministros Encargados del Poder Ejecutivo. JAS ocupaciones consiguientes a los sucesos de armas ocurridos en los dias 93 1 24 del que rije, no me habian permitido comunicar el parte circunstan. ciado de lo ocurrido. El 23, como a las nueve de la mañana, las fuerzas rebeldes, en dos sec- ciones, ocupaban la inaccesible posicion, denominada Cerro-gordo 1toda la ri- vera Norte del rio del Rinconcito. Por tanto, dispuse lo conveniente para em- prender el ataque, i despues de luchar sobre aquellas posiciones, durante to- do el dia, se logró desalojar a los del Cerro-gordo, a eso de las seis, de la tarde. ] Por ser la hora espresada, 1 distar aquella posicion cerca de una legua de esta Villa, dispuse la reconcentracion de la fuerza que combatia, ¡el mo- vimiento se ejecutó de una manera regular. Pero el 24,1 en virtud de haber ingresado al campo enemigo, en la noche del 23, un refuerzo de tropas de Chiquimula, de setecientos hombres, los di- sidentes en número de mas de mil cuatrocientos, tomaron por el rumbo del Calvario, i a las siete de la mañana, emprendieron su ataque sobre esta plaza. Tuve parte oportuno de ese movimiento, 1 desde luego mandé tropas a su en- cuentro, que se verificó en las inmediaciones del templo referido. La lid, se fué generalizando, porque los enemigos, conocedores del terreno, prolongaron su linea de circunvalacion por todos los puntos cardinales de esta Villa: habien- do ocurrido encuentros bastante vigorosos, 1uno de ellos, que duró como tres horas de un fuego nutridísimo en el llano del Calvario, hácia el rio del Rin- concito, en donde comenzó la dispersion de los disidentes. Esta se jeneralizó en todas direcciones: se emprendió la persecucion; 1 la fatiga de dicho dia ter- minó despues de las doce, en que se veía al enemigo desfilar en retirada, siem- pre buscando las montañas. Estas dos jornadas han sido costosas a las fuerzas combatientes. Se han sepultado hasta hoi, delos insurrectos enemigos, sobre ciento ochenta muertos: quedaron algunos heridos, que he mandado asistir. Se tomaron del enemigo tres piezas de artillería, cerca de doscientas armas fulminantes, cincuenta 1 seis Ré- mington de primera clase, de daga, i mucho parque de estas armas. Se le to- maron treinta i un prisioneros, de ellos veinticinco de Chiquimula, que indul- tados i socorridos, han vuelto a aquel Departamento. En las fuerzas de mi mando, hubo sesenta 1 cuatro muertos 1 veinte 1 seis heridos, que con los del enemigo, pasan a esa Capital para que se les asista. 3e han presentado hasta hoi, mas de seiscientos hombres, la mayor parte con arma, i creo. que los derrotados de Chiquimula, no harán otra cosa, que entregar las armas al Ciudadano Presidente Provisorio, a virtud de asegurar los presentados haber sido engañados por algunos descontentos. Para concluir con los restos de la faccion, hoi hice salir dos secciones sobre diversos puntos, que me prometo realicen aquel fin. Lo que tengo el honor de comunicar a UU. Libertad 1 Reforma. Cuartel jeneral en Santa Rosa, Setiembre 26 de 1871. (3 Ll rriós. IMPRENTA DE LUNA (SUCESORES), A CARGO DE JOSE ABAL,