CIRGULAR A LOS SEÑORES CURAS, SACERDOTES Y DEMAS FIELES NUES- TROS DIOCESANOS. | ie SaBEr: que el día de ayer doce del mes corriente, hemos recibo del Íl!mo. y Rymo. Señor Dr. Don Manuel Francisco Véles, Obispo E- lecto de Comayagua, sus respetables letras, en las que nos dá el aviso de su promoción á esta Silla Episcopal. Tan fausto acontecimiento debe circular llevando al respetable Clero y á todos los fieles en general, la alegre nueva, que la Divina Providencia ha puesto término ú la Vacante en que existia la Iglesia, y que benigna- mente nos ha concedido un virtuoso Prelado que nos llena de esperanzas. El oficio aludido literalmente dice: “Guatemala 20 de Agostu de 1887=Al M, I. Señor Don F'orencio Carranza. Dignísimo Vicario Capitular de la Diocesis de Comayagua=M. l, Señor:=Dios Nuestro Señor en su misericordia inefable se ha dignado poner término a la viudéz de esa Santa Iglesia de Comayagua, que US. M, L, ha sa- bido gobernar con tanto tino, discreción y prudercia, y con tan diestra mano, por el largo espacio de mas de dos años=En el consistorio secreto del dia 23 de Mayo último, Nuestro Smo. Padre, el Señor LEON XIII, que hoy feliz— mente gobierna la Iglesia, se ha dignado crearme Obispo de esa Diócesis, que en los tres siglos y medio que lleva de existencia, ha tenido una serie de Pre- lados ilustres per su saber, por su virtud y por su celo—El oscuro nombre de mi persona, privada de todo mérito y careciendo de las aptitudes necesarias, se eclipsa por completo entre los vivos resplandores de esas lumbreras del Epis- copado Católico; pero Dios que se complas» en escojer las cosas débiles y mas pequeñas del mundo para confundir a los grandes y poderosos, y que usa do instrumentos miserables para hacer resaltar mejor su gloria y su poder, ha que- rido que yo forme parte de esa serie, y es preciso conformarse con su voluntad soberana y resignarse con sus inescrutables designios=Es por esto M. 1, Sr., que despues de haber usado de los medios puestos á mi alcance para rehusar dignidad tan elevada y puesto tan distinguido, superiores y con mucho, a mis escasos recursos de ciencia, idoneidad y virtud, cuando el éxito mismo de los sucesos, me ha hecho conocer que es esto la voluntad de Dios, lie debido con- formarme con ella, conssumando el sacrificio de mi existencia y de mi vida, y hasta de mis afectos, inclinaciones y caracter para consagrarme por entero al servicio de esa preciosa Grey, porcion escojida del gran rebaño de Jesucristo, que el Cielo ha querido confiar á mis débiles cuidados=Nada ciertamente po- día hacer sin los poderosos recursos de la gracia y sin los auxilios soberanos del Señor; pero sí debo confiar, en que Aquel que me ha llamado á tan eleva- do ministerio, y que ha querido poner sobre mis hombros el pesado fardo de responsabilidad tan enorme, sabrá concederme esas gracias y esos auxilios, sin los cuales mis deseos, mis esfuerzos y mis actos serían de todo punto inefi- caces y nulos=Cuento tambien M. L. $, con la eficaz y activa cooperación de V. S. M. L, quo tan relevantes pruebas ha dado de amor y celo por los inte- reses de la Iglesia y de las almas, y con la del Venerable Cabildo y Clero Dio- cesano, de cuya fidelidad, ilustracion y virtud tanto debemos esperar=Todo nuestro empeño debe dirijirse á unirnos con los mas estrechos vínculos de la fraternidad sacerdotal y cristiana, porque solo así podemos llevar á buen tér— miuo la guarda de los grandes intereses de Jesucristo, que se nos han confia=