1 Para los que créen que atacamos solo por sistema aquí tenemos una muestra. Nuestro célebre cura, el Presbítero Francisco Vivar del Campo, bien conocido en la sección occidental de la República, y donde quiera que ha posado $u pesada planta, marchóse para los pueblos de la Sierra. Este proceder por demás incorrecto é€ indigno, despues de haberse comprometido solemne- mente á dirigir aqui en la Parroquia que es á su cargo, las ceremonias de la “Santa Semana,” para lo cual recibió nva considerable suma de dinero, en pago de sus honorarios, lo exibe triste- mente como un comerciante de pacotilla. Se trata nada ménos que de una villanilla; de un engafío rastrero; de un desprecio á la so- ¿ciedad del Quiché con asomos marcados de estafa. Tales son pueblo, nuestros escarnecedores que viven de la explotación. íste Párroco misiona frecuentemente á la Sierra. El dice: “4//á entre los inditos hay plata blanca; en el Quiché no hay más que billetes, tan inmundos, como sus salvajes moradores.” Chocarreras son las expresiones del redomado clérigo del Campo. El oro es el Dios de estos aventurcros, negociantes en religión. Protestamos solemnemente contra los procederes de semejante Ministro del culto católico. Tudo se le ha dado aquí: convento para que viva y muchas otr»s ganguitas que él sabe; pero para que sirva cuando se le necesite, no para que ejerza su comercio en otros pueblos, Cansados ya de oír las saudeces que desde el púlpito, en lenguaje tabernario dirige coutra personas honorables y sensatas, lo repetimos, protestamos enégicamente, contra el desmora- lizador Presbítero del Campo. Sus obras, sus palabras, sus ejemplos,su vida toda, pugnan diametralmente con la Iglesia Católica la moral, la razón y las buenas costumbres. Con 3->erdotes deigual calaña, la fe morirá pronto. Ellos, que so: la deshonra de la reli: gión la matarán pronto. e Bandadas de cuervos que han asaltado el templo de la fé. Hipócritas y maliciosos, son los ajentes activos del desorden y desmoralización de las fami- lias, Los tales han prostituido el cristianismo y las puras doctrinas del Dios hombre que por redimirnos pereció clavado en una cruz, El Clero honrado ha sido víctima de esta clas de sanguijuelas desde tiempos remotos. Desgraciadamente á nuestros pueblos tarde ha llegado el convencimiento. De ahí que hallamos sido explotados iuhumanamente por tantísimos años. A] presente, el velo se ha descorrido: la aurora del progreso nos alumbra. ¡Loada sea la Reforma! En nombre de la religión tan abatida; en nombre del pueblo engañado por los farsantes del catolicismo; en nombre dela sociedad; en nombre de la moral ultrajada; en nombre de la razón y de las buenas costumbres, Señor Arzobispo, protestamos contra las incorrecciones despeluznan- tes del Párroco Vivar del Campo. Haced desaparecer de entre nosotros esa epidemia, amenaza viva y constante del cristia- nismo. SANTA CRUZ DET, QUICHE: 31 de MARZO DIA JUEVES SANTO de 1904. Unos Vecinos. “Tip, +» POPULAR” Tot.