Honrado por los habitantes de Sololá, con la misión que mucho agradezco, de representar al Departamento en nuestra Exposición que va á inaugurarse, no puedo menos que decir algo sobre la importancia de estos Certámenes en el desarrollo material é intelectual de los pueblos que como el nuestro, es jóven en la vida de las Naciones y que por consiguiente, tiene mucho que avanzar para su completo desarrollo. Se ha dicho, en mi concepto con justicia, en tesis general, que los países agrícolas no deben ser industriales, pero si la tesis es exacta en abstracto, en concreto admite variadas excepciones. Aprovechar nuestras materias primas para industrias elementales, si así pueden llamarse, constituye la ventaja de independizar al. pueblo, hasta cierto punto, del tributo que se paga á la importación; y, por otra parte, constituye la base sobre que deberá levantarse, un día ú otro una industria adelantada. Por otra parte, la Agricultura que obtiene diariamente nuevos progresos y que constituye nuestro elemento primordial de vida económica, necesita de estos Certámenes para estar á la altura en que-se halla en los países más adelantados. Estimular al productor, premiar al pequeño industrial, es una idea generosa y grande que debe de producir ópimos y prácticos resultados. Nosotros nos tomamos la libertad de excitar, á nombre de nuestros paisanos locales, á todos los habitantes de la República, para que secundando la iniciativa del Gobierno, contribuyan, con más y más ahinco, al progresu de estos torneos de la inteligencia y del trabajo. Y no podemos concluir estas líneas, sin consagrar un voto de gratitud cariñosa al Benemérito de la Patria, al Señor Licenciado Estrada Cabrera, que ha completado, con esta Exposición anual, que conmemora el día del nacimiento de la Patria Centro-Americana, las Minervalias, que consagran el mérito del maestro y el premio al estudio. La Patria lo aclama y el Pueblo lo bendice! GUATEMALA, SEPTIEMBRE DE 1904. J, ALEJANDRO ARCHILA. Tip. de Carlos M. Amos